Claramente ya es tarde para decir “se viene el frío”… ¡El frío ya está acá!
Este año, más temprano que en otras temporadas, las bajas temperaturas acechan casi todos los puntos del país desde hace algunas semanas.
Por más que te guste el frío, salir de la cama por la mañana, bañarse o salir a la calle se hace más difícil y da más pereza que en el resto del año. Y ni hablar de subirte a la bici…
Pero no te rindas tan rápidamente: con tomar algunos recaudos básicos, circular en bicicleta en invierno puede ser una experiencia tan placentera como lo es en épocas de temperaturas más altas e incluso a mediados del año podés seguir evitando el caos del tráfico.
En este SeguridadNews te dejamos algunos tips a tener en cuenta para salir a pedalear con este frío de locos:
Acá podrás leer:
Aprovechar las horas de sol
Lógicamente la principal característica de esta etapa del año que nos echa para atrás a la hora de salir en bici es la baja temperatura y lo rápido que anochece. Encima es sabido que si, por ejemplo, hace una temperatura de 4º, al andar a apenas 30 km/h la sensación térmica corporal puede bajar hasta -7º.
Por eso lo ideal es hacer buen uso de todas las horas de sol disponibles para mantener el cuerpo lo más caliente posible a pesar de la temperatura ambiente. Así que si algún día te levantas, mirás por la ventana y ves mucha luz, ¡no dudes en sacar tu bicicleta a la calle!
Vestimenta
En relación con el punto anterior, la ropa extra pasa a ser un punto fundamental. Así que vamos de arriba hacia abajo:
Cara, cabeza y cuello:
Partiendo de la base de que el casco sigue siendo elemental — más en esta época, donde los trazados pueden estar más resbalosos por el agua o la nieve en algunos sectores — muchos acuden a gorros finos para usar entre la cabeza y el protector o a orejeras. Quienes se oponen al gorro alegan que hace aumentar la transpiración y eso, sabemos, puede producirte una fuerte gripe sin que te enteres. Es importante mantener la cabeza con buena temperatura, ya que ella libera entre el 15 y el 30% del calor corporal, pero no hay que excederse. La conclusión es que sea lo que sea que elijas para la zona más alta del cuerpo, tenés que evitar que sea un impedimento para ponerte el casco.
Muchos adeptos a la bici también acuden a tapones caseros de algodón para los oídos. ¿El motivo? Evitar una otitis por las bajas temperaturas.
Los últimos consejos tienen que ver con las gafas (no por el sol, sino por la irritación que produce el contacto del frio con los ojos; se recomienda que sean transparentes para que no se empañen) y un pañuelo alto (para tapar los sectores de la cara a los que no llega el gorro).
Tronco y brazos:
Una gran ayuda que tenemos hoy a disposición son las camisetas térmicas. Si bien no son baratas, sí que útiles y duraderas. Es preferible que la primera capa sea esa, seguida de alguna prenda de algodón de manga larga y más gruesa. Se recomienda que la capa externa sea impermeable o rompevientos, dependiendo de las condiciones climáticas del día.
Manos:
Es una parte del cuerpo fundamental en estos casos. Es una sensación muy fea cuando sentís que se te congelan los dedos, los cuales hay que tener en las mejores condiciones posibles para el agarre del volante y los frenos. Obviamente la mejor solución es un buen par de guantes que te deje maniobrar con tranquilidad. En caso de lluvia, los guantes de neopreno aparecen como la primera opción.
Piernas:
Existen unas mallas o calzas que son algo más gruesas que las habituales y que incluyen un forro polar para combatir el frío. Por encima de éstas, y aunque no te guste cómo quedan estéticamente, unas medidas que lleguen hasta las rodillas, estilo futbolista, aportan a la causa.
Al igual que las manos, las piernas son herramientas fundamentales para andar en bici, por eso las recomendaciones de prendas ajustadas y al cuerpo. Un buen complemento es alguna crema o gel para calentar los músculos previamente.
Pies:
Zapatillas más gruesas de lo habitual, como por ejemplo de montaña, son recomendables. Y por qué no también dos pares de medias. Una ayuda casera, sobre todo si no tenés un calzado de mucho grosor, es poner papel de diario en la zona de los empeines y punteras. Vas a ver que ni siquiera sentís el ingreso de aire.
Visible por niebla o lluvia
Todos los recaudos que tomás en cuanto a hacerte visible cada vez que salís a pedalear, como chalecos reflectivos o luces instaladas en la bici, cobran el doble de importancia en invierno, época proclive a la niebla y a la baja visibilidad, tanto la propia como la de los demás conductores que comparten tu ruta.
Alimentación+Hidratación
Por más que en clima invernal sudes menos y sientas menos cansancio, una correcta alimentación antes y después de salir a bicicletear siguen siendo esenciales. Y mucho más la hidratación: especialmente si salís en travesías extensas y no sólo por un paseo urbano, asegurate de tener tu botella de agua o de algún líquido energizante e hidratate aunque no sientas demasiada sed. Como siempre, más vale prevenir…
Entrar en calor
Para evitar contracturas, desgarros u otras lesiones musculares, trata de estirar los músculos o de hacer una pequeña entrada en calor antes de salir a pedalear. Esto es siempre recomendable, pero principalmente si la temperatura es baja, ya que a tu cuerpo le costará más entrar en calor.
Desde Seguridad News esperamos que puedas poner en práctica estos tips para que subirte a la bicicleta en los meses de invierno pueda ser un placer al igual que en el resto del año. Y, como siempre, si tenés algún consejo más, no dudes incluirlo en los comentarios o en nuestra página de Facebook.