Con el correr de los años las medidas de seguridad vial en todos los sentidos posibles se van acrecentando. Desde la construcción de un auto hasta calles y rutas más seguras y carriles exclusivos para vehículos pequeños, todo apunta a que haya la menor cantidad posible de siniestros.
Pero los avances tecnológicos, que en muchos casos juegan a favor de estas mejoras de prevención, a veces terminan siendo una contra. El caso puntual más conocido son los celulares: aumenta año a año en nuestro país la cantidad de peatones accidentados por tener la atención puesta en sus pantallas.
El hecho de caminar mirando hacia abajo en vez de hacia adelante lógicamente reduce nuestra concentración en el camino y hay mucha gente que termina cruzando la calle cuando no le corresponde mientras responde un mensaje o mira sus redes sociales.
Un semáforo en el piso rosarino
En busca de una solución más abarcativa, en Rosario y Buenos Aires está a prueba un experimento ya usado en varias ciudades europeas: un semáforo en el piso.
Ante el desconocimiento de las normas de tránsito para peatones de muchos de los que recorren la ciudad a pie, la intendencia de Rosario inauguró el 20 de marzo pasado su primer juego de luces en las intersecciones de las calles Córdoba y Corrientes. Allí, antes de la senda peatonal, las luces muestran sus colores rojo, amarillo o verde, según corresponda que el peatón cruce o no la calle. Obviamente, este dispositivo está conectado al semáforo tradicional que ven los automovilistas.
Así, si alguien viene con la mirada en su smartphone, al menos verá una luz de fondo que le indicará si debe detenerse.
Durante el año próximo se añadirán otros nueve semáforos de este tipo en la ciudad santafesina.
Buenos Aires se suma
A partir de la iniciativa rosarina, el mes pasado la Capital Federal también inauguró esta novedad en la esquina de la Avenida del Libertador y Ramos Mejía, en Retiro, una zona muy transitada de la ciudad. La idea del gobierno de este distrito es continuar con estas instalaciones en los barrios de Caballito, Flores y Belgrano.
