Ya sea durante un viaje programado o en el uso cotidiano dentro de la ciudad, hay un tip de tu auto que posiblemente sea el más básico de todos para el correcto funcionamiento: que tenga el suficiente combustible.
Sí, puede sonar obvio y algo que sabemos desde que tenemos conocimiento de las condiciones mínimas del funcionamiento del auto, pero… ¿a quién no le ha tocado la experiencia de quedarse sin nafta o gasoil mientras manejaba?
La temida luz de reserva puede encenderse por motivos evitables por nosotros, como haberse olvidado de cargar, confiarse en que vamos a llegar a destino con el combustible que tenemos o no querer hacer el gasto (sobre todo con los precios actuales), pero también por otras cuestiones que no dependen de uno, como los paros de estaciones de servicios o la simple falta de combustibles (en Argentina estamos bastante acostumbrados a ambos casos).
Acá podrás leer:
Cuidado con las consecuencias
Cualquiera sea el motivo por el que tengas el tanque casi vacío, es importante que sepas que esto también puede traerle consecuencias a tu auto.
Expertos aseguran que si circulás con las últimas gotas, la bomba de combustible (que lleva la nafta o el gasoil a los cilindros) puede absorber aire además de líquido y provocar así un sobrecalentamiento. Como consecuencia para el vehículo, se pueden desgastar piezas y notarás que al motor le va a costar más generar potencia.
La mencionada bomba de combustible, por otro lado, deberá hacer un mayor esfuerzo si tiene pocos recursos y su refrigeración se hará más difícil. ¿Resultado? Te va a durar mucho menos de lo pensado y hoy por hoy cambiarla es bastante caro (para autos nuevos, los precios pueden llegar a los $3.000) y, salvo que seas un experto, vas a tener que recurrir a un mecánico para que haga el trabajo.
Frecuencia
Si la conducta se repite varias veces, dentro del tanque de combustible se van a terminar formando residuos sólidos, los cuales también pueden terminar siendo chupados por la bomba y dañando otras partes, como los inyectores.
Claro, esto no significa que estos problemas aparecen si circulas con la nafta justa sólo una vez. Son consecuencia de circular constantemente con el líquido justo en tu tanque.
Algunos consejos
Más allá de evitar quedarte con poco combustible, se recomienda que cambies los filtros con la frecuencia que indica el manual de tu auto.
A la hora de hacer un viaje extenso, tratá de calcular siempre dónde harás tus paradas y la autonomía que tendrás en ese punto. Y siempre cargá en estaciones de servicio de confianza.
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¿Vos sos de los espera a consumir hasta la última gota de nafta? ¿Ya tuviste alguna experiencia de este tipo? ¡Contanos!
